La película “La Fonfria” de Jesús Bosque presentada por su mentor y coprotagonista Iñaki Cabo llevó la emoción al nutrido grupo de personas que asistimos al acto el pasado sábado 10 de Febrero en el Castillo de Ainsa.
La gesta de abrir una via -La Graciela- con dificultad 7 de escalada en hielo en una impresionante cascada colgada del valle de Chistau evocó a cuantos pudimos verla el espíritu que ha animado las mejores páginas del alpinismo.
Cuando Iñaki descubrió el paraje decidió que ese reto era suyo y de nadie más. Sin embargo, hubo de contar con el apoyo de muchos colegas y la paciencia de años para poder culminarla por fin en 2006. Todo ese camino recorrido queda bien reflejado en la cinta, donde se han incluido grabaciones de otras escaladas en distintos puntos del planeta. La declaración de intenciones se establece desde el primer momento: el soberbio colmillo helado merecía una ascensión limpia y respetuosa en libre desde la base hasta la complicada transición de la roca al hielo suspendido a más de 100 mts de altura. La alta tecnología de los nuevos materiales, que ha llevado esta disciplina a cotas insospechadas, no está reñida con un planteamiento de pureza si no todo lo contrario. Y en ese diálogo íntimo en que el escalador acaba trepando por el vertiginoso pasillo helado de sus propios miedos, enfrentándose a la incertidumbre de rebasar los límites en el siguiente golpe de piolet, ofreciéndose consciente en una lidia que no admite errores, Iñaki y sus dos compañeros de cordada Javi Bueno y Isidoro Sanchez (Chiro), salen a hombros entre el clamoroso silencio del magnífico escenario. Un escenario que no está ni en Patagonia ni en el Himalaya, sino aquí, en nuestro querido y nunca del todo conocido Sobrarbe por obra y gracia de un loco sentimental: su nombre Iñaki, su apellido Cabo.
José Miguel Chéliz