Bonita ruta circular programada por la frontera franco-española en el Valle d´Aspe que se empieza desde el aparcamiento d’Espelunguère al final de la estrecha carretera que parte de les Forges d’Abel, justo al otro lado del túnel del Somport a la izquierda, asciende al refugio de Arlet, pasa por el Valle de Aguas Tuertas y vuelve al punto de partida por el puerto de Escalé situado debajo del conocido ibón de Estanés.
Durante la semana nos planteamos la suspensión de la salida ya que nos coincidía con la prueba cicloturista Quebrantahuesos y se cortada el tráfico en Sabiñanigo a las 6,30 horas y además las previsiones de las condiciones meteorológicas no eran muy buenas. Finalmente ante la anunciada probable mejora de la meteo decidimos madrugar y realizar la excursión.
A las 6,45 horas nos juntamos en Castiello de Jaca siete compañeros de los clubes CAS y Nabain llegados desde Zaragoza, Huesca, Ainsa y Boltaña y sobre las 7,30 comenzamos a caminar desde el aparcamiento citado d´Espelunguére (1.250 m.). El día era muy húmedo con nubosidad orográfica pero sin amenaza de agua.
La senda asciende justo enfrente y tras atravesar un corto tramo de hayedo desemboca en una zona abierta de pastos. Seguimos las marcas del sendero que nos llevan hacia la Cabaña Grosse o de Saramayou (1.623 m.), bordeando en sentido contrario a las agujas del reloj el pico Punta Acué o Gabedaille. Atravesamos de nuevo un tramo de bosque antes de avistar la mencionada cabaña. En este punto podríamos desviarnos hacia el Collado de Acué, situado enfrente en lo alto, pero nosotros continuamos por la senda ascendente de la derecha que rodea la montaña de Couecq hasta alcanzar un collado sin nombre divisorio de aguas y que continua llano hacia la izquierda hasta alcanzar el Col de Lapachouau (1.891 m.), siempre siguiendo las descoloridas marcas de la Alta Ruta Pirenaica (HRP).
En este tramo la visibilidad se hizo casi nula y empezó a chispear por lo que tuvimos que ponernos los chubasqueros. Desde el collado seguimos girando hacia la izquierda por una zona más o menos llana en cuyo fondo hay un pequeño lago y dos cabañas ganaderas. Es el circo de Banasse y las cabañas de Caillaous (1.877 m.) y a nuestra izquierda ésta el pico Arri. Superado este tramo el camino continúa en suave ascensión hasta el ibón de Arlet con su refugio de montaña (1.986 m.), donde paramos para protegernos un rato del agua y almorzar. El tiempo continuaba con precipitaciones suaves e intermitentes que a esta altura se convirtieron en agua-nieve y la visibilidad seguía siendo nula.
En lo alto, aunque no los vemos, sabemos que están los picos de Arlet (2.207 m.) a la izquierda y D´Allary (2.215 m.) a la derecha, y entre ellos el Col d´Arlet (2.093 m.) collado al que nos dirigimos para pasar a territorio español, concretamente al valle de Aguas Tuertas. En este collado el tiempo nos dio una tregua y el cielo se abrió un poco lo que nos permitió admirar el valle en toda su extensión y en altura un poco la Sierra de Secús.
Iniciamos el descenso por la senda que baja al fondo del valle por la denominada Faja de los Arroyoshasta confluir con el sendero GR-11 que viene desde la Selva de Oza y remonta todo el valle hacia el Puerto de Escalé o de Aguas Tuertas (1.635 m.). El GR-11 continua ascendiendo por la derecha hacia el ibón de Estanes, pero nosotros nos desviamos a la izquierda para dirigir nuestra marcha de nuevo a territorio francés de regreso al punto de partida en un descenso muy rápido, resbaladizo y embarrado por la zona denominada Puerto de Gabedaille, terminando la jornada sobre las 13,45 horas. Como el tiempo seguía lluvioso nos cambiamos rápidamente el calzado empapado de agua y cruzamos a territorio español para comer en un área de descanso muy cercana a Jaca donde por fin lucía el sol.
Excursión pasada por agua con un recorrido de casi 20 kilómetros, realizada en un tiempo de 6,15 horas (con muy pocas paradas) y un desnivel positivo acumulado de unos 980 metros.
José Ramón Monclús
CAS-Nabain
Me apetece comentar que yo este sábado no pude participar por tener un compromiso social, pero aunque no hubiera sido así creo que me hubieran asustado tanto el madrugón por la celebración en el mismo sábado de la Quebrantahuesos (salida a las 5,30 horas desde Huesca, Aínsa y Boltaña y supongo que una hora antes los que vinieron desde Zaragoza) como las previsiones climatológicas para el día, por lo que no me queda más que "quitarme el sombrero" y felicitaros a todos los que os atrevistéis y pudisteis con todo ello, seguro que además disfrutando de la jornada y compañía.
José María Lafuerza. CAS
